Ungrupo de 20 Guardiamarinas comandados por el Capitán de Corbeta-Jefe de Estudios, José María Soriano Ascaso visitaron el pasado miércoles por la tarde la Catedral gótica de Barcelona, sede del Arzobispado de Barcelona, para participar en una ofrenda al conocido "Cristo de Lepanto" situado en la capilla de San Severo del recinto religioso barcelonés.
La representación de la Armada fue recibida en el Altar Mayor por el Deán catedralicio y canónigos del templo. En su intervención, el religioso recordó que el edificio eclesiástico es la tercera catedral construida en Barcelona, reuniendo los estilos románico y gótico. En un espacio inferior al Altar Mayor se encuentra la tumba de Santa Eulalia, patrona de Barcelona, “muy querida por los barceloneses”, dijo el Deán.
Por su parte, un Guardiamarina respondió a las palabras anteriores para recordar “la vinculación de las gentes de mar con la fé cristiana”, señalando que asistía a un “homenaje sencillo y solemne a Lepanto”, imagen construida en las Atarazanas barcelonesas.
Acabadas las alocuciones, la Unidad de Música embarcada en el “Elcano” entonó los acordes de la Oración, que fue interpretada por todos los asistentes, entre los que se encontraban el Segundo Comandante Naval de Barcelona, Jordi Bonet Albalat, el Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores de Barcelona, José Manuel Juárez y el Capitán de Navío José Manuel Vallespín, Director del Departamento de Estudios e Investigación y de la Revista de Historia Naval. Posteriormente, la formación militar se dirigió en solemne procesión hasta la Capilla de San Severo donde se encuentra el Cristo de Lepanto. En esta secuencia, dos GGMM portaban una corona de laurel que fue depositada a los pies de la imagen con la interpretación de “La Muerte no es el final”, cantándose finalmente la Salve Marinera.
Facultad de Náutica