XC CRUCERO DE INSTRUCCIÓN. VIDA A BORDO, 7 DE JULIO DE 2018

Categoría: Noticias
Publicado el Lunes, 30 Julio 2018 15:15
Escrito por jeronimo
Visitas: 1128

Mi fin de semana

Son las 20:36, huso QUEBEC, del 7 de julio. Es sábado. Hace calor y no es para menos. Nos encontramos navegando por aguas caribeñas, concretamente a la altura de las Islas Bahamas. Suena a película, ¿eh? A veces no nos damos cuenta de que somos unos privilegiados, que lo estamos viviendo es único.

Ha sido ya el ocaso, pero todavía quedan los recodos de un Sol que nos ha acompañado durante todo el día. Luz suficiente para quedarnos un ratito más charlando en cubierta, o para hacer deporte, o para leer un poquito. Cualquier excusa es buena para seguir aquí fuera. ¡Qué bien se está cuando se está bien!.

De fondo tenemos música andaluza, consecuencia directa de tener un alto porcentaje de gaditanos a bordo. Dice la canción "para volver a volver, como lo has hecho mil veces" y es inevitable pensar en la vuelta a casa. Y es que queda poco más de un mes para volver a pisar suelo español. La "madre patria", como decían nuestros amigos sudamericanos cuando aún navegábamos con el resto de los barcos de “Velas Latinoamérica 2018”.

Poco a poco va anocheciendo. Otro día más que se nos queda por la popa. Ocaso tras ocaso; amanecer tras amanecer. Últimamente estamos disfrutando bastante de las 24 horas del día. Hemos acabado los principales exámenes y con el buen tiempo que tenemos podemos disfrutar de un par de horas de playas, tomando el Sol en los tranvías y refrescándonos con agua salada a través de una especie de ducha que siempre montamos cuando sale el Sol.

También hemos comenzado a vestir ropa más fresca. Esa es otra: ya desde el Canal de Panamá vestimos lo que nosotros llamamos uniformidad 'piruleta' (aunque el término correcto es de aguas cálidas), ya sabes, como si fuésemos niños de parvulitos: pantalones cortos y medias altas. La primera vez que nos vimos en el espejo con esto puesto nos entraba la risa. Pero bueno, cumple su función, que nos es más que comodidad y estar fresquitos.

Sin más, otro día más se nos va por la popa. En unas horitas será el cambio de guardia, comenzando los puntos nocturnos, que aquí nunca paramos. Mañana volvemos a empezar.