LOS GUARDIASMARINAS DESCANSAN DE SUS ESTUDIOS, UNOS REALIZANDO EJERCICIO FÍSICO, OTROS TOMANDO EL SOL EN CUBIERTA CON LA OPORTUNIDAD DE DIVISAR DELFINES NADANDO JUNTO AL BUQUE. CUADERNO DE BITÁCORA. 18 DE ABRIL DE 2016

Categoría: Noticias
Publicado el Martes, 19 Abril 2016 13:31
Escrito por jeronimo
Visitas: 1215

Lunes, comienza un nuevo día y una nueva semana a bordo del buque-escuela "Juan Sebastián de Elcano"’ Amanece con un cielo salpicado por las nubes, que regala una imagen y un recuerdo hermoso para la memoria, como otros tantos disponibles solo para los privilegiados miembros de esta dotación.

Tras levantarse y un necesario desayuno para hacer frente al día, las Damas y Caballeros Guardiasmarinas suben a cubierta con su sextante para la primera observación astronómica y la toma de datos. Posteriormente, tras una Revista de Policía realizada hasta el más mínimo detalle, los alumnos regresan a su Cámara para dar comienzo a las diversas clases del día. Teniendo un pequeño descanso a media mañana para recuperar fuerzas con un buen bocadillo, la mañana transcurre en la Cámara de GGMM, salpicada por otra observación astronómica del Sol para posteriormente realizar un ejercicio tan clásico como hermoso: situar esta secular nave sobre el mundo sin el empleo de medios modernos, tal y como se hacía antaño.

A la finalización de las clases las Damas y Caballeros Guardiasmarinas tienen la opción de descansar brevemente, aunque la gran mayoría eligen salir a cubierta a disfrutar del Sol y la brisa marina realizando un poco de deporte, esencial para el mantenimiento de la buena forma física necesaria para nuestra futura labor. En esta ocasión tuvieron la magnífica oportunidad de divisar delfines nadando junto al navío. Una imagen verdaderamente hermosa.

Para continuar el día, las Damas y Caballeros Alumnos se sientan en su propia Cámara donde almuerzan todos juntos.

Tras un magnífico almuerzo y un buen café los GGMM prosiguen con las clases hasta bien entrada la tarde. Finalizadas estas se aprovecha para coger un libro, aceptar el reto de una partida de ajedrez, hacer deporte, charlar con la dotación y entre nosotros o, sencillamente, mirar a la vasta extensión que es el océano y poder inundarse cada uno en sus pensamientos, plasmándolos en un diario.

Al ocaso, la dotación se reúne en el Alcázar para el tradicional toque de Oración, único en la Armada.

Finaliza la singladura navegando a vela, con aparejo de juanete sin trinquetilla ni petifoque, escandalosas y cangrejo trinquete antagallado en la 2ª faja. A rumbo 305º y 8 nudos de velocidad, estado de la mar, marejadilla, con mar de fondo de 1,5 metros de altura, cielos parcialmente cubiertos y buena visibilidad, sin más novedad.