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Categoría: Noticias
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Publicado el Domingo, 16 Junio 2013 18:13
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Escrito por jeronimo
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Tal y como se adelantó en el anterior “vida a bordo”, el jueves 6 de junio tuvo lugar en cubierta una “Feria del Libro” para celebrar el día de las Fuerzas Armadas. Aunque realmente el día de las Fuerzas Armadas se celebró en España el fin de semana anterior, a bordo fue imposible, ya que las condiciones meteorológicas adversas durante ese fin de semana impidieron cualquier tipo de celebración en cubierta.
Esta particular feria sirvió también para conmemorar que este año es el 80 aniversario de la primera Feria del Libro llevada a cabo por los libreros de Madrid en 1933. De esta forma, también se quiso fomentar el interés por la lectura en este crucero de instrucción.
Para esta feria, en la cubierta se instalaron diferentes stands. En uno de ellos se pudieron ver los libros más antiguos que se guardan en las bibliotecas de la cámara de oficiales y de guardias marinas, así como en el local de la Derrota del Comandante. Son libros que normalmente no están al alcance de todos y que pudieron ser vistos por todos los miembros de la dotación. También hubo un stand dedicado al intercambio de libros entre la dotación, con el requisito de que fueran devueltos antes del final del crucero de instrucción.
Asimismo, se expusieron libros excedentes de las bibliotecas del barco que pudieron ser adquiridos por miembros de la dotación. Para ello se estableció un curioso sistema de pago a través de nudos marineros. En función de la calidad y posible interés del libro, éste tenía un precio que oscilaba entre uno y cinco nudos, de forma que al pagar, todos los nudos debían ser diferentes. Para hacer más fácil este sistema de pago, los marineros de maniobra enseñaron al resto de la dotación a hacer nudos.
Además, para conmemorar el día de las FAS los guardiamarinas de Infantería de Marina explicaron a los miembros de la dotación los diferentes tipos de armamento y equipamiento del cargo del buque en una exposición estática.
El paseo por los puestos de los “por un día libreros” estuvo asimismo amenizado por una banda musical formada por guardiamarinas, a la que se fueron incorporando otros miembros de la dotación. Unos y otros interpretaron canciones con instrumentos musicales como el piano, la batería y diferentes tipos de guitarras. Para finalizar esta singular Feria del Libro, la banda de música del buque interpretó un pasacalle por el combés y el alcázar.
Tras finalizar esta curiosa feria, se realizó una comida en cubierta para toda la dotación, disfrutando todos juntos de un agradable día en cubierta.
El viernes, la meteorología comenzó a empeorar nuevamente. Esta vez un frente cálido pasó por encima de nuestra posición, por lo que la lluvia y el viento no se hicieron esperar. Se preveía viento fresco con rachas de frescachón, por lo que durante la tarde del viernes se tocó “maniobra general” para cargar las velas altas, el juanete y el foque.
También hay que destacar que los guardiamarinas tras realizar el viernes el examen de la asignatura de “Maniobra”, van a afrontar la última semana del periodo escolar a partir del próximo lunes. Aunque tras la salida de Den Helder, tendrán aún que enfrentarse a los exámenes ordinarios de las diferentes materias.
Durante el sábado por la mañana se impartió una conferencia en la cámara de guardiamarinas sobre seguridad, explicando diversas normas sobre autoprotección cuando se sale a la calle en las visitas a puerto. Posteriormente, un grupo de guardias marinas expuso una conferencia titulada “Españoles en la Kriegsmarine”, que versó sobre las peripecias de unos cuantos oficiales, suboficiales y personal de marinería de la Armada que estuvieron unos meses en unidades de la marina alemana allá por el año 1943.
Tras el paso del frente cálido el día anterior, pasaba ahora por nuestra posición un frente frío, ambos asociados a la misma borrasca. Esto propició que continuaran las lluvias durante todo el periodo.
Durante la tarde se atravesaron zonas de niebla, lo que redujo la visibilidad a menos de una milla. Al reducirse tanto la visibilidad se tuvieron que activar las señales acústicas de navegación a vela, tal como indica el Reglamento Internacional para Prevenir los Abordajes en la Mar, además de tener que extremar la vigilancia en el puente. Tal y como pasó el frente frío antes mencionado, el viento roló del SW hasta el NW y amainó hasta bonancible, por lo que se dio el foque y el petifoque.
El domingo las lluvias cesaron tras el paso del frente, y el viento amainó considerablemente. Con viento flojo a bonancible, se dieron tanto las velas altas como el juanete. Ahora se navegaba con todo el aparejo menos el foque volante.
Como hecho a reseñar, a la hora de la comida en la cámara de oficiales se celebró la entrada en cámara de los últimos oficiales en embarcar y de aquéllos que se encuentran comisionados a bordo. Es una tradición en la cual los oficiales de nuevo embarque invitan a todos los integrantes de la cámara a una comida o una cena. Así cuando los “nuevos” oficiales desembarcan para ir a otro destino, la cámara de oficiales les devuelve la invitación. En esta ocasión los entrantes eran 5 oficiales entre dotación y comisionados. La comida, hay que decirlo, para satisfacción de los “nuevos” oficiales, fue excelente y el rato que pasamos todos juntos inolvidable.
A unos diez días de arribar a Den Helder, el buque se encuentra a menos de 500 millas de la entrada del canal de la Mancha. Llevamos 19 singladuras navegando exclusivamente a vela desde que se inició el cruce desde las costas de Estados Unidos hacia Europa. Sí, aunque parezca mentira, está a nuestro alcance la hazaña de cruzar el Atlántico norte a vela por primera vez desde que allá por el año 1928, el “Juan Sebastián de Elcano” realizara su viaje inaugural de vuelta al mundo. No hay que lanzar las campanas al vuelo, pero está cerca la posibilidad de hacer historia y es lógico el entusiasmo de toda la dotación en lograrlo en los próximos días.
