Continuamos navegando con viento frescachón por la proa con el aparejo reducido al cangrejo mayor popel antagallado a la segunda faja de rizos y con trinquetilla. El barco sigue moviéndose sin parar de una lado hacia otro y de la misma manera continúan los guardiamarinas acostumbrándose a malos días de mar.
Por la mañana tuvimos tiempo de preparar conferencias y exámenes que nos vienen por la proa y, tras la comida daban comienzo las conferencias de San Diego. En estas conferencias los compañeros de la cuarta vigilancia nos expusieron la recalada de navegación, la conferencia de seguridad y la recalada cultural de la ciudad. En la recalada de navegación nuestros compañeros nos expusieron con todo detalle tanto el fondeo del día previo, la entrada y la salida de puerto, así mismo dieron a conocer al equipo de navegación que estará en puente durante la entrada y salida de puerto. En cuanto a la conferencia de seguridad, nuestro compañero infante de marina de la cuarta vigilancia nos expuso con todo detalle los peligros de seguridad con los que podemos hacer frente en la ciudad y como tratar con ellos. Por último y no menos importante la recalada cultural nos dio una idea de lugares que visitar durante nuestra estancia en puerto así como los mejores sitos para pasarlo bien después de duros días de navegación.
Una vez acabaron las conferencias, ya se empezaron a ver a los primeros deportistas subir a cubierta para, aguantando el equilibrio por el movimiento del barco, poder mover un poco el cuerpo y despejar la mente. También se ve por cubierta a algún que otro lector interesado en sus páginas o incluso corrillos de gente planeando su pequeña escapada a San Diego.
Llegaba la hora de la cena y es el momento en el que los guardiamarinas se sientan en sus mesas y esperan ansiosos lo que el espectacular equipo de cocina de a bordo ha preparado. Esta vez nos sorprendieron con un puré de verduras y con un espectacular revuelto ibérico que pocas personas podrán probar.
Terminada la cena la cámara poco a poco se va vaciando y con ello el día se va acabando. Debido al movimiento en cubierta no hubo el tradicional concierto de la banda de música y ya solo quedan unos pocos que tienen conferencias que preparar o algunos otros que se quedan estudiando para futuros exámenes.
No quería antes acabar sin mandar un saludo a mi padre, a mi madre y a mi hermano a los que les agradezco enormemente el cariño que me transmiten todos los días y a los que espero ansioso en el famoso muelle de torpedos.
En el Océano Pacífico, en demanda de San Diego y a bordo del B/E "Juan Sebastián de Elcano" a 8 de abril del 2024,
Guardiamarina de Primero Alejandro Serrano Montesinos