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Categoría: Noticias
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Publicado el Viernes, 09 Septiembre 2016 13:03
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Escrito por jeronimo
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Estamos ante una “edición especial” de este diario de “Vida a bordo” porque no todo lo que os vamos a contar transcurre a bordo. Permitamos la excepción, ya que es por una razón de peso. Y es que uno no siempre puede disfrutar de una isla con tanto encanto.
“¡Diana, diana! Arranchado de sollados y aseo personal, comienza el reparto del desayuno”. A pesar de que sólo eran las 06:45 (de la mañana para los que tengan dudas) a bordo del buque-escuela "Juan Sebastián de Elcano" la gente se levantaba ya con la sonrisa puesta y pegando un salto de la cama. ¡Hoy entramos en Las Palmas de Gran Canaria!
Eran las 09:30 y al fin habíamos atracado. Se acercaban los primeros familiares a recibirnos. Tras recibir la visita del Almirante-Jefe del Mando Naval de Canarias, el Contralmirante Juan Sobrino Pérez-Crespo, se tocó retirada general, que para el que no lo sepa implica que la dotación puede desembarcar para disfrutar de su tiempo libre.
Tras un primer día que dio para mucho, al día siguiente (domingo) por la mañana había regata. El Real Club Náutico de Gran Canaria había invitado a los Guardiasmarinas a participar. Era una oportunidad excepcional para los caballeros de aprender de grandes regatistas en aguas canarias. Pero como no podía ser de otra manera, los GGMM no solo fueron a aprender, sino a demostrar sus habilidades marineras y alguno incluso se llevó un trofeo. Si el Real Club Náutico invitó a la regata, la entrega de premios fue a bordo de nuestro "Elcano".
También el domingo por la mañana se celebró la Santa Misa en la toldilla del barco celebrada por el padre capellán de a bordo, nuestro páter.
Simultáneamente transcurrían las primeras visitas del público a bordo. ¡En apenas tres días recibimos a más de 3.500 personas! ¿Cómo es posible que habiendo recalado ya 56 veces en este puerto siga viniendo tanta gente a ver el barco? Seguro que alguno repetía la visita.
Normalmente sólo la dotación y los Alumnos tenemos el privilegio de disfrutar este barco en la mar. Por ello, con estas visitas intentamos acercar a los españoles uno de sus barcos más entrañables. La gente contempla y admira un barco de 89 años que mantiene su impecable estado y sobre todo su esencia de velero y buque-escuela. En definitiva,pueden disfrutar de un extracto de la historia flotante de España.
El lunes los GGMM visitamos la villa de Arucas y la Fábrica de Ron Arehucas, donde nos trataron excepcionalmente y pudimos aprender sobre la cultura e historia de tan entrañable villa.
El martes la visita fue a la Base Aérea de Gando y a la Casa de Colón donde el trato volvió a ser inmejorable. En la base aérea aprendimos cómo trabajan nuestros compañeros del Ejército del Aire y comprendimos que cada vez es más necesario trabajar juntos.
En la Casa de Colón, nos empaparon de una parte vital de la historia de España, del descubrimiento de América, donde además, la Armada tuvo un papel fundamental.
Llegó la diana del miércoles y la gente se levanta sabiendo que hoy salimos a navegar. Salimos de puerto con amigos y familiares que nos acompañaban en veleros y embarcaciones de recreo.
Estos cuatro días en la isla de Gran Canaria han sido cuanto menos una gran experiencia. Pero este barco está hecho para navegar y por ello debemos volver a la mar. Con la mayor ilusión y ganas ponemos rumbo a Cabo Verde.
No sabemos lo que nos aguarda en Praia, ya que ninguno hemos estado. Pero lo que sabemos es que, al igual que en Las Palmas, viviremos aventuras y experiencias que quedarán en nuestros recuerdos para siempre.
